El porno es un veneno del maximo grado de toxicidad mental que vi y que desafortunadamente conoci propiamente en el tiempo que estuve en este mundo. Yo siempre digo que mi forma de experimentar esa auyodestruccion comparada a las drogas mas perjudiciales fue como pasar de beber ocasionalmente una cerveza con amigos a necesitar una botella del vodka mas intenso y rancio para saciar una sensacion de vacio infinita que nunca se termina. Pasar de caminar de casa al trabajo y del trabajo a casa. A hacer deportes extremos y pasar muchas horas por semana en el gym. Un cambio extremo y rotundo que hace definitivamente a ese cambio como algo irreversible y destructivo a la salud tanto fisica como mental. La ansiedad de la tolerancia a ese veneno. La angustia de la abstinencia de ese mismo veneno. Como un perro que quiere morderse la cola. Algo circular y absurdo. Ese mismo argumento circular de todas las adicciones. Siempre se vuelve al mismo lugar de desesperacion y angustia por el consumo y la consumicion del veneno elegido. El porno. El mas dañino y peligroso para la salud que existe. Pasar de la creencia a que eso es normal e incluso saludable. A aproximarse al intento de querer terminar la vida de uno con el peso de toda esa angustia y vacio sin fin por la ausencia del chute pornografico. La necesidad de nunca estar satisfecho y esa misma imposibilidad de ser realmente satisfacido por esa toxicidad adictiva que tiene el maldito porno. La sensacion de querer salir del pozo que uno mismo cavo pero en lugar de escalar seguir cavando. La adiccion al porno es nunca salir del agujero. Es no saber nunca si se esta adentro o afuera del agujero. Es saber a ciencia cierta que lo que hace esta mal. Asi como esta mal consumir determinadas drogas o alimentos en exceso o fuera de lo permitido. Uno no es conciente del limite de lo permitido. Y uno termina excediendose. Sin darse realmente cuenta de ello. Tocar fondo sin haberse dado cuenta que uno esta cayendo cada vez mas aceleradamente. Ver como todo se desmorona sin motivo aparente. Ese es el daño que causa este veneno. Uno empieza quizas viendo algun desnudo casual en imagenes sueltas. Y cuando te das cuenta ya estas como un yonki a la cocaina viendo una simulacion de violacion como si fuese algo normal. Auto destruccion de la moral y el sentido comun. Deformacion monstruosa de los gustos y preferencias sexuales. Las consecuencias son multiples y distintas. De varias formas y colores. Tantas y diversas que se hace demasiado dificil abarcarlas a todas. El porno no tiene orden. No tiene principio ni final. Es tan infinito como el universo. No te alcanzarian ni un millon de vidas humanas para ver siquiera la millonesima parte de todo lo que existe en ese mundo de lo llamado contenido pornografico. Y asi y todo con ver solo una porcion tan infima como una gota en el mar ya has visto todo y nunca podras regresar al estado anterior al que no habia visto aquello. Quedaras permamentemente inundado con ese resentimiento y arrepentimiento de por vida. Una cicatriz que lamentablentemente quizas nunca termine de sanar. El veneno cerebral de tamaña magnitud y poder no puede repararse asi nomas. solo te lleva la vida. Tu vida. Tu vida social. Tu vida laboral. Tu vida afectiva. Todo lo que tienes. Nada mas y nada menos. Cuando te des cuenta ya es tarde. El monstruo se lo ha llevado. Y nunca te lo devolvera. Le has vendido tu alma. Y eso no se devuelve. Deberas cargar con esa piedra el resto de tus dias. Si es que puede llamarse vida a aquella miseria en la que has quedado. Una pena realmente.
Animo! Amigo hay que salir de esto juntos. No te rindas nunca pese al gran numero de caídas que tengas. Un abrazo. Ángel.
